Mirando al exterior, hundido entre algodón, con los ojos nublados. Mirando sin mirar a través del cristal, recordando un pasado en el que
tú estabas junto a mí... Si pudiera elegir querría regresar a aquel tiempo
en el que los dos pensamos que este amor no tendría final...
Cuando te vi marchar entendí que la edad había marchitado la flor de nuestro amor, con tanta fuerza ardió que se había apagado.
Mas hoy, te vuelvo a ver marchar, sabiendo que ahora ya no te veré
volver. Te vas, te vas dejándome sin nada que decir, sin nada que
ofrecer... Cuando te vi marchar entendí que la edad había marchitado la flor de nuestro amor, con tanta fuerza ardió que se había apagado.
Déjame que te llore en un rincón, sé que así será mejor. Olvidé lo que eras para mí, ahora sólo siento un dolor sin fin.
Ahora sólo siento un dolor sin fin...
No hay comentarios:
Publicar un comentario